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La fiesta está preparada: Probamos el “Dorfs, Hammers For Hire” el Party Game del Estudio Argentino “Ravegan” y te contamos porque tenes que jugarlo .

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Acostumbrados a  los juegos de las grandes empresas, muchas veces, buenos juegos escapan a nuestro radar. Y ni hablar de aquellos referentes a la industria nacional.

Si jugaron al Gang Beasts, estarán familiarizados con este tipo de juegos, donde la premisa es pasarla bien, y desestresarse sin importar los resultados. Y DHFH lo cumple a creces.

Nuestros protagonistas, los  Dorfs (entre los 5 a elegir), deberán fabricar armamento para que las tropas del Barón (El Rey Vikingo, o Jearl) puedan enfrentar a las tropas del antagonista del juego, La Sombra. Y con una campaña de más de 30 niveles (rejugables por cierto), donde tendremos que conseguir los estandartes de cada mapa, a medida que vayamos cumpliendo nuestros objetivos, se pondrán a prueba nuestras habilidades con el mando (o teclado), fabricando y recolectando ítems, cumpliendo así con el encargo (o “receta”), para entregar el arma (Lo cual nos trae reminiscencias de juegos cómo el “Overcooked!”). La barra en la parte inferior marcará el avance de nuestras tropas, si logramos cumplir con los pedidos, o la del enemigo, si no lo hacemos.

También tendremos una bonificación, si sacamos los encargos en orden, y puede ser fundamental, a la hora de conseguir los estandartes, que determinarán nuestra victoria (o derrota), cuando se acabe el tiempo.

El Dorfs de a 2 (o más), es una diversión pura. La clave para el triunfo en los modos cooperativos, será la comunicación entre los jugadores.

Este modo historia, puede terminarse tanto individualmente, cómo en cooperativo (lo mismo que el Modo Arcade). Pero el verdadero disfrute, sin dudas, se encuentra en el multiplayer.

Las risas no van a faltar. Ya que la división de tareas hará todo más fácil, pero también tendremos que tener cuidado de no chocar u obstruir a nuestro compañero, lo cual puede más frecuente de lo que esperamos. Hemos llegado al punto incluso de chocar en el aire, mientras repartíamos tareas de maneras insólitas. 

Las combinaciones tendrán sus propias dificultades. Armar metales evitando que se derritan, o imbuir de magia un objeto requerirá no sólo destreza, sino también mucha concentración.

Y si bien la misión a cumplir en todos los niveles, parece fácil, no será tan simple llevarlo a cabo si lo hacemos solos, ya que recordar las combinaciones con las que construimos las armas, no es tarea difícil. Pero todo cambia a medida que avanzamos en el mapa, ya que se le empiezan a sumar obstáculos, como el barro en el suelo que nos ralentiza, o las incursiones enemigas (en forma de lluvia de flechas por ejemplo), que cortarán abruptamente nuestra tarea si nos alcanzan.

También el piso en los niveles de hielo será todo un desafío a superar, cuando tenemos que movernos por el nivel, así sean distancias cortas.  O elementos propios de cada nuevo desafío, como escaleras que tendremos que mover si o si, para obtener ítems.

Cada nivel tendrá su propia dificultad característica, y un apartado visual único.

A todo esto debemos sumarle el tiempo para realizar todo lo que nos piden .Al principio, sobra. Pero a partir del quinto nivel, la presión para fabricar cada ítem mientras vemos que el mismo se agota, así como la barra de batalla.

A todo esto debemos sumarle el tiempo para realizar todo lo que nos piden .Al principio, sobra. Pero a partir del quinto nivel, la presión para fabricar cada ítem mientras vemos que el mismo se agota, así como la barra de batalla.

Por último hay que destacar su estética, y la ambientación, al estilo nórdico medieval. Esto se puede ver no sólo en el lore del juego, a través de los videos que nos narran las historias, sino también en el armado de los niveles. Cada uno se ve, y se juega de forma totalmente distinta, siempre con ese espíritu jocoso, que se traslada al gameplay del juego (cargado de chistes internos). ¿ O vas a dejar de jugarlo, cobarde? (Tal cual figura en el mensaje al salir del juego).

Su lograda estética, cómo los menús y un apartado visual trabajado en los personajes y el reino donde transcurre el juego, sin lugar a dudas son dignos de remarcarse.

Otro gran punto a su favor, es el precio. Divertirse por el precio de USD 2,99 (Hoy cerca de $3000) en los tiempos que corren, es un beneficio que no puede ser descartar.

Por todos estos motivos, nos parece que el Dorfs es una gran experiencia Multiplayer, que trae grandes dosis de diversión, con el aditivo de ser desarrollado en nuestro país. Y encima a un costo que hoy en día no vas a ver en Steam.

Cruzamos los dedos por que obtenga más contenido a futuro. Más niveles, nuevos personajes utilizables, skins personalizadas, o nuevos obstáculos, pueden ser sin dudas un gran motivo para mantener viva la llama del juego casual.

Cómo dicen en el juego, Que la forja este contigo este contigo!  (“May the Forge be With you”)

Nunca dejes de jugar! (Al Dorfs)

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